
Syd Barrett, el diamante que brilló como el sol
Inglaterra, específicamente Londres en los 60 era the place to go para la cultura. Moda, pintura, música ere eréa. Los que estaban afuera quieran entrar y los que estaban adentro no querían salir. Roger y Syd, dos jóvenes de Cambridge intentaban entrar a esa escena. Roger, dos años menos joven y mucho más feo se le adelantó.
Una vez que Syd Barrett llegó a Londres, Roger estaba tocando con los Abacaps, banda germinal de Pink Floyd integrada por Bob Klose, Nick Mason y Richard Wright. Los dos últimos se convertirían en el batería y teclados de Pink Floyd, mientras que el primero, más orientado hacia el jazz y presionado por sus padres para terminar su carrera de arquitectura, dejó la banda y se convirtió en nota al pie en la historia de Pink Floyd.
De esta época datan temas como I’m a King Bee, Candy and a Current Bun. Luego grabarían con la EMI dos singles: Arnold Layne y See Emily Play. En 1967 lanzan el álbum The Piper at the Gates of Dawn, un absoluto clásico del rock. De este disco debut podemos recordar Astronomy Domine, Interstellar Overdrive (una joya de caótica psicodelia), Matilda Mother y Bike que cierra el álbum de manera insólita entre gongs, relojes y sonidos de pato entre otras cosas.
Este álbum los catapultaría a la fama y a medida de que el reconocimiento de la banda crecía, la salud mental de Syd Barrett iba en dirección contraria, producto de viajes, no precisamente en bicicleta.
Para el segundo álbum de Pink Floyd, Barrett paso de compositor y liricista principal a tener solo un tema. Este tema es Jugband Blues con mensajes que se suponen están dirigidos a los demás miembros de la banda o al mundo en general. Este tema seria su última colaboración para la banda.
Luego de esto, lanzaría dos álbumes en solitario. El primero se titula The Madcap Laughs. Un álbum acogedor en el cual su voz y su guitarra son los principales protagonistas. Con ventas suficientes para el segundo, se dió luz verde para Barrett. Aunque considerado generalmente como un álbum de menor genialidad, vale la pena escucharlo tan solo por temas como Dominoes, Wolfpack y Love Song.
Tras intentos infructuosos para que grabe otro álbum o que trabaje como productor, vuelve en 1978 a su ciudad natal a vivir en la casa de su madre, porque estaba seco. Alejado de los flashes, pintando y viviendo de los royalties de su música, dejó el mundo en el 2006.
Su producción quizá no fue muy extensa aunque si lo fue su influencia. Influyo en los mismos integrantes de Pink Floyd grabaron Wish You Were Here inspirado en parte por su trágica historia como se puede apreciar en el tema Shine on You Crazy Diamond. En el álbum se tratan temas como la alienación y la industria musical (Have a Cigar). Inclusive, durante la grabación de este disco, Syd visitó de manera inesperada y en cirscunstancias muy poco claras a sus ex compañeros de banda. Hace poquito escribimos sobre este llamativo suceso acá.
Temas semejantes, incluyendo el de la guerra, serian explorados en los discos posteriores, porque a Waters le encantaba escribir sobre eso. Siempre es de resaltar el contraste entre el humor y espontaneidad de la obra del Pink Floyd liderado Barrett con la obra de Pink Floyd “tardío” liderado de manera algo autocrática por Waters, mucho más seria y solemne.
Para cerrar, va este pequeño homenaje quizá el tema más tocado de Pink Floyd. Sí, ese que todos los guitarristas del universo usaron para intentar levantar. Sí, ese tema que en realidad se lo escribieron a un amigo, que brilló tanto hasta que se perdió.